Los luceros de ocho puntas, que se han convertido en uno de los símbolos de identidad de nuestro municipio, se encuentran en la bóveda de los Baños Árabes, datados de época almohade, s.XII-XIII, y declarados Bien de Interés Cultural. Únicos en entorno rural en la provincia de Sevilla, se utilizaban, además de para la higiene personal, para socializar y relajarse, casi como nosotros usamos el yacimiento arqueológico hoy en día.

Disfruta de las maravillosas fuentes del jardín de inspiración hispano-musulmán situado en el yacimiento de los Baños Árabes. Revestidas de azulejos de colores y conectadas por canales, nos hacen disfrutar de la sensación de paz que transmite el agradable sonido de sus aguas.

Durante este período, Palomares del Río se denominaba Al-Rauz, el jardín, por el vergel que había en la zona. El yacimiento, único en la provincia de Sevilla, data de la época almohade, s.XII-XIII.

EL arroyo Caño Real llega a nuestro municipio desde Mairena del Aljarafe. En su día fue la principal fuente de agua del pueblo, como prueba la cercanía de los Baños Árabes. Su cauce ha sido recientemente rehabilitado, dotándose de un parque periurbano para disfrute de los ciudadanos. Aquí podemos disfrutar de la gran vegetación de juncos y cañas que nos envuelven y que nos invita a hacer un descanso.  Siguiendo su curso hacia el sur llegamos a la fuente de La Regüela para incorporarnos al camino de Las Teatinas, incorporándonos aquí al corredor verde metropolitano.

La Hacienda Casa Alegre data del s.XVI y es la mejor conservada de nuestra localidad, pues mantiene casi todas sus dependencias: el patio de señorío, el patio de la labor, la almazara y la vivienda. Su entrada es una mezcla de neoclásico y regionalismo, y está flanqueada por dos cañones de hierro fundido del s.XIX. La fachada presenta el color blanco de la cal y el rojo, muy característico en las haciendas aljarafeñas. Conserva la Estrella de David, recuerdo de la deportación de judíos que se realizó desde la judería sevillana a nuestra población tras la reconquista. Por aquel entonces nuestro municipio fue conocido como “Paterna de los judíos”.

Situada en la calle Iglesia, la Hacienda El Molino, s.XVIII, en su origen, estuvo unida a la de Casa Alegre. Posee una torre de contrapeso, utilizada en su tiempo para la obtención de aceite. Tras las últimas remodelaciones, sus propietarios han colocado algunas impresionantes piedras de molino en la rampa de acceso a modo de decoración. Otro rincón muy especial de nuestra localidad.

La Hacienda de Córdoba es una de las construcciones más antiguas del pueblo y, posiblemente, origen del mismo, aunque hoy en día, solo queda una nave de molino del s.XVI. Construida en época hispano-musulmana sobre los restos de un Al-Muniat o casa de campo.

De gran importancia para las Misioneras Eucarísticas de Nazaret afincadas en nuestra localidad, pues su fundador, san Manuel González García, se alojó en ella durante su estancia en Palomares allá por el año 1902.

Tanto la iglesia de Ntra. Sra. De la Estrella como su formidable torre campanario son de origen mudéjar, s.XIII. Dan fe de ello los 7 arcos de herradura y polilobulados que se aprecian en el primer cuerpo de su torre. El segundo cuerpo, construido tras el terremoto de Lisboa de 1755, es de estilo barroco y está rematado con un chapitel ortogonal cubierto por los característicos azulejos sevillanos blanco y azul.

Bello azulejo conmemorativo de la canonización de San Manuel González, situado en la fachada de la Iglesia de Ntra. Sra. de la Estrella. Representa en sus esquinas los cuatro sagrarios más importantes en su vida: el de Palomares del Río, el de Huelva, donde fue arcipreste, el de Málaga, donde fue obispo y el de la catedral de Palencia.

Este santo visitó nuestra localidad el 2 febrero de 1902 enviado en una misión por el arzobispo de Sevilla.  Se dirigió a la Parroquia y, de rodillas, ante el Sagrario abandonado, pensó en la cantidad de sagrarios abandonados que habría en el mundo, recibiendo la gracia carismática que transformó su vida y orientó sus obras eucarísticas. Fue el fundador de la Unión Eucarística Reparadora, movimiento religioso integrado entre otros por las Misioneras Eucarísticas de Nazaret, que siguen presentes en la vida activa de nuestro municipio.

El majestuoso retablo mayor de nuestra iglesia fue contratado en 1588 al retablista y escultor manierista Miguel Adán, siendo transformado en estilo barroco en el siglo XVIII. Presenta pinturas de San Estanislao de Kostka, San Antonio de Padua, Santa Rosa de Lima y San Francisco de Paula, todas de dicho siglo, de igual manera que la Virgen de la Estrella, patrona de la localidad, que preside la hornacina central.

Del siglo XVI se conserva la pintura que aparece sobre la puerta del Sagrario, el Niño Jesús, así como las del ático, que representan a San Pedro y San Pablo, realizadas por el formidable pintor Vasco Pereira. Conocemos igualmente que el retablo fue dorado por Juan Gómez Couto en 1664.

En nuestra querida Iglesia de Ntra. Sra. de la Estrella, agregada a una de las naves laterales, encontramos la hermosa capilla del Sagrario.  En ella se encuentra la imagen mariana que presidía originariamente el retablo mayor. Se trata de la Virgen del Rosario, de gran belleza y elegancia, obra de Miguel Adán de 1588, si bien su policromía actual data del siglo XVIII.

Si observamos su túnica podemos ver estrellas ya que antes de ser Virgen del Rosario fue de la Estrella. El magnífico Sagrario de plata se atribuye al prestigioso orfebre sevillano Fernando Marmolejo, quien destacó especialmente por realizar el camarín de la Basílica de la Macarena.

La Hacienda San Rafael, originaria del s.XIII estaba situada en la manzana que va desde la calle Iglesia hasta la calle Antonio Machado. De ella sólo queda el portalón de acceso a la misma situado frente a la iglesia y su torre-mirador. Esta última data de principios del s.XX y es atribuida al arquitecto sevillano Aníbal González (autor de la Plaza de España de Sevilla). La torre está rematada con un mirador que se cobija bajo cubierta de tejas a cuatro aguas con remates cerámicos, sustentado sobre arcos de medio punto sobre pilastras.  Es una singular muestra de la arquitectura regionalista andaluza.

Hacienda Ulloa, s.XVIII, señorío (vivienda) y nave del molino aceitero. La torre del contrapeso del molino data de 1798. De planta rectangular, cuenta con remate barroco, acabado en chapitel octogonal, almenillas y nueves remates cerámicos. En su interior cuenta con las vigas originales de madera, así como con la piedra de prensa.

En su fachada principal podemos encontrar una exquisita representación en cerámica de Ntra. Sra de la Estrella, Patrona de Palomares del Río, en tonos azules según el estilo tradicional del azulejo sevillano, realizada por el maestro ceramista Mariano Pérez, vecino de nuestra localidad.

Reloj de sol situado en la parte superior trasera del señorío de la Hacienda Ulloa, dando a la Plaza de las Moreras. Fue restaurado durante las obras realizadas en el año 1991.

Se trata de un Reloj vertical declinante. Está grabado en piedra y lleva numeración arábiga de 6 am a 6 pm. Las líneas horarias están pintadas de color granate y el estilo termina en una bolita.

Situado en el Parque de las Moreras (antiguo patio de labranza de la Hacienda Ulloa), justo delante de la Casa de las Luces, este hermoso “árbol” fue traído desde Cuba en algunos de los viajes que se hicieron en los años 90 con motivo del hermanamiento con el municipio cubano de Batabanó. Se trata de un ombú o bellasombra, una especie muy curiosa, pues, aunque tiene forma arborescente, incluyendo un tronco grueso que alcanza una altura de 20 metros, con una amplia copa de hasta 15 metros y grandes raíces visibles, es una hierba gigante.

Nave del molino de la Hacienda Ulloa, s.XVIII. Las vigas de madera de pino son originales En la viga que sostiene el peso de la capilla del molino se puede ver inscrita su fecha de colocación, “Año de  1798”. Forman parte de la torre de contrapeso del molino de aceite de la hacienda.

Se piensa que las vasijas son de origen romano y aparecieron tras las primeras obras de rehabilitación del edificio en el año 1991, ya que éstas no se encontraban visibles, sino que estaban enterradas bajo tierra. Se utilizaban para decantar las aceitunas.

Esta piedra de prensa se encuentra en la nave del molino de aceite de la Hacienda Ulloa, s.XVIII, junto a la torre de contrapeso. Sobre ella se colocaba una “torre” de aceitunas y alfombras de esparto en capas, que se prensaba con la piedra del molino. El zumo de la oliva caía sobre los surcos dirigiéndose hacia las vasijas donde se decantaba el aceite.

Patio organizador muy bien conservado de la Hacienda Santa María, situado en la calle Cortinales. Se accede a él atravesando su emblemática portada barroca, con un arco rebajado sobre pilastras terminado en un tejaroz. Datada en el siglo XVIII, formó parte de la Hacienda San Rafael, aunque se desconoce cuándo se separaron. La nave del molino aceitero y su torre de contrapeso se encuentran en buen estado de conservación. Actualmente alberga un establecimiento hostelero, por lo que se puede “visitar” mientras disfruta de la gastronomía local.

La cruz original se encontraba en la explanada de la ermita del poblado de Ugena. Cuando esta se abandona, se traslada a la actual Plaza de Colón, antes conocida como “de la Cruz”. Actualmente, la original se encuentra en el cementerio municipal, permaneciendo una copia, realizada por el herrero local Marcelino Gómez, en la plaza sobre pedestal. Rodeada de naranjos aporta a este lugar una impronta muy especial.

Espacio pintoresco conocido popularmente como “El Rincón del Beso”, suele estar decorado con flores al estilo de patio sevillano. Tiempo atrás corría el agua por su fuente, aunque ahora luce seca debido a razones sanitarias. Está situado en la Avda. de Almensilla. Nuestra vecina Concha Aido se ocupa de darle colorido a este espacio tan peculiar.

Este mural está situado en el CEIP Vicente Alexaindre, a la entrada de la localidad. Fue realizado por el maestro ceramista Mariano Pérez, vecino de la localidad utilizando la técnica de cuerda seca.

Representa las olas del mar con sus características formas y colores. También se pueden ver revoloteando algunas gaviotas.

Recorriendo la Ruta del Agua, nos encontramos con el parque periurbano de Razo de Ugena, al que da nombre el arroyo del mismo nombre. Desde aquí podemos continuar nuestro paseo por el Corredor Verde Metropolitano hacia la vecina localidad de Coria del Río a través del Cordal de Ugena o Camino de la Isla. El arroyo Ugena desemboca en el Río Pudio, afluente del río Guadalquivir.